Una caja fuerte pequeña es la opción más adecuada cuando se trata de proteger elementos o productos de pequeño tamaño. Además de cumplir con todos los parámetros de seguridad, son prácticas y cuentan con un diseño reducido lo cual favorece su camuflaje al poder esconderse con mayor facilidad.
Con las cajas fuertes pequeñas, podemos guardar y proteger objetos de valor en nuestra casa y garantizarnos que no estén a la vista de todos.
Cajas fuertes pequeñas para casa
La elección de una caja fuerte para nuestra casa, no es una decisión fácil. Desde Arcas Gruber os aconsejamos que tengáis en cuenta estos aspectos, para hacer una buena elección:
- La ubicación Es un aspecto fundamental, lo más aconsejable es que se situé en un lugar poco visible y discreto.
- Estructura de la caja Además de tener un diseño resistente, los materiales deben de ser de gran calidad y dureza.
- Capacidad y tamaño Otro factor que podríamos considerar como fundamental. Es muy recomendable elegir el tamaño adecuado para proteger todo lo que deseemos dentro de la caja fuerte.
- Instalación Hay varios modelos de cajas fuertes, pero lo más recomendables es fijarla en un espacio concreto para garantizarnos una mayor seguridad.
- Nivel de seguridad Corresponde al tipo de cerraduras que se va a utilizar, si combina métodos mecánicos, electrónicos con códigos de acceso o una cerradura de llave más tradicional.
Caja fuerte HS458-01 hotel
Cajas fuertes HS458-02 hoteles
Cajas fuertes HS470-01 para hoteles
Cajas Fuertes SS0301 de hotel
Cajas fuertes pequeñas camufladas
Como bien dice su nombre, su objetivo principal es pasar desapercibidas y evitar que sean fácilmente visibles a ojos de los demás. Generalmente se suelen situar en suelo, ocultas bajo un mueble o una alfombra.
Caja fuerte pequeña empotrable
Este modelo es el más habitual, y son perfectas para el resguardo de objetos y vienes de valor en comercios o residencias. Presentan un alto nivel de seguridad al combinar diferentes técnicas de apertura. Además, su estructura de acero una vez que se incrusta en el hormigón hace que sea prácticamente imposible de manipular o sacar.
